Se rehabilita un edificio con tan solo una fachada, situado en la plaça dels Estudis, al núcleo antiguo de Sant Celoni, un barrio con un alto grado de protección a causa de su importancia histórica por el pueblo. La edificación es adosada a las paredes medianeras de los edificios situados a los lados laterales y al fondo de la parcela.
La planta principal (primera) se ha vaciado y es ahora concebida como un espacio diáfano dedicado a las actividades de día y estará coronado por una glorieta que permite a los habitantes salir del volumen del edificio y que tener vistas laterales hasta el macizo del Montseny.